- Países, ciudades, pueblos, comunidades, comarcas, regiones, provincias de todo el mundo tienen historias increíbles sobre vidas y costumbres que contar, ancestros que se arrastran desde tiempos inmemoriales, hasta que se convierten en tradiciones hechas, como es el caso de una extraña e inimaginable costumbre de un pequeño pueblo llamado San Pedro Huamelula del Estado de Oaxaca México, donde un alcalde por una antigua costumbre, contrae matrimonio con un caimán hembra, extraña sentencia de “casados” pero que invoca prosperidad y abundancia para el pueblo.
La noticia ha sido publicada por importantes medios escritos, televisivos, Agencia de Noticias de México y del mundo, además viralizada por las RRSS, sin embargo, no sólo fue socializada, sino que de manera rápida surgieron preguntas entre la gente lectora y los propios internautas: ¿Por qué los alcaldes se casan con cocodrilos en Huamelula de Oaxaca?
¿Qué contaron los medios del mundo? Fondo Negro, diario digital de Oruro Bolivia, comparte:
- Entre ovaciones y júbilo, el alcalde de un pequeño pueblo en el sur de México contrajo matrimonio con un caimán hembra, siguiendo así una antigua tradición destinada a invocar la prosperidad y la abundancia para su comunidad.
En esta ocasión, Víctor Hugo Sosa, el alcalde de San Pedro Huamelula, una localidad indígena chontal ubicada en el istmo de Tehuantepec, en el estado de Oaxaca, reveló su cariño hacia su reptil consorte llamada Alicia Adriana, quien desempeña el papel de “la niña princesa” durante esta ancestral festividad.
“Acepto la responsabilidad porque nos queremos, eso es lo importante, no puede haber un matrimonio si no se quieren. Nos queremos y acepto casarme con la niña princesa“, dijo Sosa durante la ceremonia.
¿Por qué los alcaldes se casan con cocodrilos en Oaxaca? Cuentan los medios:
- Desde hace más de 230 años, en este pueblo se celebra la unión entre un hombre y un caimán hembra como conmemoración del día en que dos etnias locales, los huaves y los chontales, se unieron a través de un matrimonio.
La tradición cuenta que las tensiones entre ambas comunidades llegaron a su fin con la boda del rey chontal, representado actualmente por el alcalde, y la niña princesa huave, personificada por el caimán hembra.
Conectarse con la Madre Tierra
- Esta ceremonia les permite “conectarse con el símbolo de la Madre Tierra (Pachamama en Bolivia). Todo ello, solicitando al poderoso la lluvia, la germinación de las semillas y todas esas cosas que representan la paz y la armonía del pueblo chontal“, explica Jaime Zárate, cronista de San Pedro Huamelula.
Después, el cocodrilo es vestida con un traje nupcial blanco decorado con detalles plateados y es llevada al ayuntamiento para casarse con el alcalde.
Joel Vásquez, pescador y habitante del pueblo, lanza su red y expresa su creencia de que la boda traerá consigo “una buena pesca, para que haya prosperidad en esta nación, para encontrar formas de vivir en paz y establecer un equilibrio“.
Antes de contraer nupcias, Alicia Adriana (el reptil) es paseada casa por casa, para que los habitantes bailen con ella, que va ataviada con falda verde, huipil negro y un tocado de cintas y lentejuelas de colores. Lleva la boca bien amarrada para evitar problemas.
Luego es vestida con su traje de novia blanco, con adornos plateados, y trasladada al palacio municipal para casarse con el alcalde.
Después de la ceremonia, el alcalde baila con su esposa al ritmo de la música tradicional del pueblo.
“Por el matrimonio que estamos llevando el día de hoy, estamos muy contentos porque estamos celebrando la unión de dos culturas, el pueblo está contento“, dijo Sosa en una entrevista a la agencia de noticias AFP.
El baile culmina con un beso que sella la unión entre el rey (alcalde) y la niña princesa (el cocodrilo).
