- “Al comprender, al interiorizarnos todos los pormenores de la consecuencia en estos territorios de la independencia, se llega a la conclusión en la que podemos definir de que, la independencia de Bolivia no fue completa, porque al momento de crear la patria, no se tenía un plan de encaminamiento económico y político”, expresa el investigador e historiador orureño, Javier Cárdenas, en una entrevista realizada por Fondo Negro, a propósito de los 198 años de la independencia de Bolivia.
Explica que el país continúa arrastrando, a través de diversos elementos, aquello que no fue bien definido en la época de la independencia, como fue la libertad de comercio que en ese entonces había y que, aparentemente, favorecía a la población de ese tiempo.
Agrega que, al haber dependido de conglomerados económicos de la época, como el consulado de Lima en un tiempo y posteriormente de haber dependido del Virreinato de la Plata; la audiencia de Charcas o la futura Bolivia, no tenía un plan de encaminamiento económico y político al momento de crearse la Patria, y “a partir de ahí nacen los caudillos, los problemas territoriales, que confabularon para que no haya una especie de hoja de ruta para poder resolver los grandes problemas que todavía subsistían desde el coloniaje”, dice.
“Como por ejemplo la no inclusión del indígena, el que hoy en día, se nos esté mencionando de que la historia empieza a partir de un momento determinado políticamente, y no entender todo ese proceso en el cual estuvieron incluidos tanto mestizos, criollos, indígenas, cada uno con sus problemas, cada uno con sus objetivos”, afirma.
Asegura que, al no entender y comprender esa parte de la historia, surgen los individualismos políticos con intereses económicos y de corrupción, hechos que el país viene arrastrando desde la colonia y que no se supo corregir o disminuir, “son taras que hemos heredado y, hoy en día continuamos con ellas, como el que estamos viendo el problema de la justicia, el problema de la corrupción, un escollo difícil de poder detectar y poder eliminar finalmente”, afirma.
Cárdenas asegura: “es ahí donde nosotros necesitamos, ante todo, una definición como país, como patria, como nación, para ver las perspectivas más adelante”.
Debatir con desprendimiento de interese personales
- El historiador advierte que otros países ya han tomado ventaja en el sentido de hacer y obtener proyectos y mega proyectos y, Bolivia no ha tomado en cuenta que va a quedar sumamente retrasado, a tiempo de ejemplificar, el mega proyecto de la instalación de un puerto en la costa del pacífico que, va a disminuir los ingresos que el país pueda tener acceso por la exportación de minerales e importaciones.
“Tenemos que estar unidos, porque eso es lo que nos falta, pero ahí viene la parte en la que tenemos que entrar a debatir, pero a debatir con desprendimiento de intereses porque muchos asisten a las reuniones a imponer su punto de vista, no hay un consenso, no hay un desprendimiento, no hay civismo, eso es lo que nos entrampa en muchas cosas, como el de la reforma de la justicia, que pareciera que no tiene salida, pero tiene salida”, asegura.
Al referirse a los hombres y mujeres del país, Cárdenas puntualiza: “debemos poner lo mejor de nosotros, nuestras mejores intenciones, nuestro conocimiento intelectual en beneficio de la nación, de la patria, que, si bien celebramos cada 6 de agosto nuestra independencia, pasa esta fecha y nos olvidamos de los problemas a nivel regional, nacional, eso hace que cada vez veamos los bolivianos un futuro más oscuro”.
La educación base del desarrollo
- El historiador, asegura que la fecha del 6 de agosto debería ser un espacio para analizar uno de los elementos más importantes que Bolivia debe vigorizar, la educación y, apunta que, la cultura es la base de todo desarrollo, pero si se descuida la educación de la niñez y la juventud, el país se va a quedar lamentablemente rezagado y va a perjudicar a su desarrollo.
“Si a las nuevas generaciones no les educamos y desarrollamos sus capacidades mentales, siempre se van a sentir inferiores, debemos darles las condiciones, para que tengan una mentalidad ganadora, pero hasta ahora se ha visto que pensamos que no pueden, y eso perjudica al desarrollo total de la sociedad”, puntualiza.
Indica que tener jóvenes mal preparados, ya es un futuro incierto, por eso se debe trabajar con la niñez, la juventud, pero no políticamente, sino darles lo mejor porque ellos tienen toda la vitalidad, toda la fortaleza para poder sacar adelante a la nación y lograr un desarrollo más productivo para todos.
Pero, añade, la educación está siendo afectada por la influencia de la televisión, Internet y las RRSS, que han invadido la vida de las nuevas generaciones que hacen un uso excesivo de estas nuevas tecnologías, que los convierte en violentos porque les aleja del contacto con la sociedad.
Señala que hace falta un estudio amplio de concienciación, sobre el papel que deben cumplir los padres de familia y los educadores, para evitar la mucha dependencia de la tecnología y saber usarla, porque se ha convertido en una nueva colonización.
“Algunos países que ya habían afrontado este uso excesivo de esta nueva tecnología, están volviendo a los libros, porque el poder se encuentra en el cultivo de la lectura, la práctica de elementos básicos para la enseñanza tanto a nivel escolar como universitaria, que nos va a llevar a mejores resultados”, afirma.
